el encierro, día dos: no tenía tiempo para almorzar :)

queridos 599 seguidores y mis lectores libres, ¿cómo les va en casa? yo nunca me preocupé por llegar a aburrirme, más bien, dije: vaya, voy a terminar mi ciclo de textos sobre el sueño que está en borradores. y ¿dónde estan estos textos? los ven ustedes? yo , no :(. es porque no estoy de vacaciones y sigo trabajando desde mi casa. no les voy a mentir que no tomé mis dos cafes matutinos, sí los tomé con un sandwichito, pero mi almuerzo… se puso dificil.

extraño leer sus publicaciones, extraño conversar tan amenamente con cada uno de ustedes 🙂 felizmente, tengo facebook y whatsapp y con algunos hemos ya cruzado las fronteras del WP y estamos en la distancia de una tecla en el telèfono 🙂 estoy atenta a todo lo que sucede en el mundo, y tengo varias ideas para compartir, las ideas que nacieron estos días, de mi propia experiencia, de hablar con personas muy diferentes, de observar las personas ajenas.

la idea de la apocalipsis nos gusta a los humanos. la cinematografia esta repleta de todo tipo de escenarios para el fin del mundo, la literatura también . entre éstos, por su puesto, las pandemias. qué puedo decir, menos mal que la actual no es la plaga de zombies, ni son extraterrestres. ni la peste. ni la cólera, ni los vampiros. pero, ¿piensan ustedes que la gente está actuando de manera predecible? alguna sorpresa (lo de papel higienico sé que sí, fue la sorpresa, pero otras) ?

espero sus comentarios

20 comentarios

  1. Anda, pues yo estoy escribiendo una serie sobre el colapso de civilizaciones. Vaya en mi descargo que es la continuación de unos debates, frutos de las discusiones sobre el COP25. Lo de la pandemia vino después.

    Lo que sí estaba haciendo en relación con el encierro es anotar mi idea más extraña del día. Por ejemplo, ayer me dio por intentar hacerle los coros a Dolly Parton en «From nine to five». Un fracaso total, oigan.

    Lo publicaba en RRSS, pero voy a tomar prestada tu idea y crear una entrada dinámica en mi blog. Solo por ver cuánto es capaz de degenerar mi mente, ya de por sí inestable, en quince días.

    Gracias por seguir ahí.

    NB: ¿Doce «like» en esta entrada y ningún comentario? Eso es más raro que lo del papel higiénico…

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    • empezando desde el final: quizá, la mayoría ya está sobrecargada con el tema, no sé 🙂 super idea de anotar lo más extraño generado por la mente 🙂 yo por ahora no siento todavía el peso del encierro, pero a los momentos cuando me permito pensar un poco, recuerdo a los judios alemanes que tomaron las medidas iniciales de Hitler como algo no viable, algo loco, sí, pero inofencivo. yo parezco a ellos: por un lado mi mente se proyecta para lo peor(no en el sentido de la enfermedad, sino, el económico: nos prometiero que los precios permaneceran invariables, y ya en el 3er día se han disparado. que significa que las personas que comparban como locos, tenian toda la vendita razón, y los que tratamos de ser racionales, estamos perjudicados ya desde ahora) y a la vez, queire ser optmista y no entrar al pánico. qué me conviene? un dilema. ahora ser racional y ser irracional ya están mezcados de manera no esperada. así que sí, la mente puede generar cosas muy interesantes, y poder abstraerse y registrarlo, es genial. quedo ene spera de la publicación prometida 🙂

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      • Lamento decirte que, desde el punto de vista económico, los compradores tempranos son racionales – máximo egoísmo – y precisamente es su saqueo lo que hace subir los precios. Por eso mismo nunca me ha gustado la perspectiva económica.
        En España también se han producido avalanchas, pero en general los precios no han subido (o yo no lo he notado), salvo algunos productos en particular que escasean (mascarillas y guantes de látex), y me sorprendería que ocurriese con la alimentación porque la competencia es muy fuerte.
        Ya he publicado el diario, pero claro, solo tiene tres día de ocurrencias: https://baladring.blog/2020/03/18/diario-de-un-sexagenario-recluido/
        Eso sí, no esperes reflexiones profundas porque bajo presión tiendo a desbarrar.

        ¡Saludos, y felicidades por ser una buena persona y no una egoísta racional!

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      • Yo, que soy otra irracional no acaparadora y además intentando mantenerme ni el el optimismo ni en el pesimismo, únicamente en un realismo que yo analizo, lo único que puedo apuntar es que esto es una carrera de fondo y no un spint y que la mente equilibrada espero salga ganando. Y no es que yo piense que la tengo equilibrada, noooooooooooo, pero al menos que la tengan los que toman las decisiones ¡por favor!
        Mantengamos la cordura ya que solo hemos hecho empezar y hay demasiados descerebrados.
        ¡Ánimo!!!

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      • la etapa dos del quest: mantener la mente equilibrada — uy, eso es bastante dificil. 🙂 🙂 besos, amiga, no sabe que me dio ganas de comer salmón 🙂 jajaja creo que mi mente quiere otra etapa de quest: get the salmon!!!

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      • La mente va a su bola a pesar de que queramos ser racionales. Estos días, todo lo que me gusta habitualmente para comer, no quiero ni verlo, sin embargo me apetecen otras cosas totalmente diferentes. El problema es que lo que compré es lo que suelo comer habitualmente. ¡ Ay, que cruz conmigo misma !!!! Jajaja.

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      • sí!! lo mismo. yo no sufro de antojos, como para alimentarme bien, calculando las proporciones de carbos-protenias y grasas, asíq eu lo que tengo en casa es mi menú habitual. jajaja y ahora, resulta que me inquieta que no haya otras cosas. es algo totalmente irracional 🙂 sin embargo tiene un gran sentido 🙂

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  2. Sigo sin entender las compras de pánico de la gente… tal vez los señores de la tercera edad con justa razón para que no salgan, ya que es una población vulnerable, pero los que somos jóvenes debemos tomarlo con calma! Saludos!

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    • pienso que en cada país existe una razon ligeramente diferente. en Perú si el gobierno te promete que no habrá problemas con el abastecimiento y que los precios permanecerán invariables, significa que debes correr y comprar lo que puedes. mañana quizá ya no habrá. los que decidimos no caer en el juego, perdimos quedándonos perjudicados. no hablo, por su puesto, de la gente rica 🙂 ellos solo lloran por dejar de ganar. se despidieron la gente para no pagarles, por ejemplo. saludos de corazón

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