SUEÑOS DE FRATERNIDAD: It’s easy if you try

Imagine no possessions

I wonder if you can

No need for greed or hunger

A brotherhood of man

J.Lennon

Si, John, no es difícil imaginar, yo nací en el mundo de la supuesta fraternidad que fracasó para mi gran suerte y por eso puedo ahora pensar, leer, escribir, hablar libremente.

Cuando esta canción fue escrita, en el decline de la loca época de los hippies, el libro de Orwell 1984 ya existía por más de 20 años. A veces pienso, y no solamente yo, que gracias a Orwell hemos podido evitar el destino descrito en este libro, a pesar de los intentos de los románticos como John Lennon que trataban de explicar a los humanos que tan lindos eran en su potencial, pacíficos, llenos de amor y altruismo, que podían construir un mundo perfecto, sin dolor, sin mentiras, sin guerras, sin posesiones, sin rivalidad, sin humanidad. Yo conozco un mundo sin posesiones: el paleolítico. Más adelante ya no había tal paraíso. Pero aún sin grandes posesiones, el Homo sapiens de hace 200 mil años no vivía en paz. El Homo sapiens siempre ha sido una bestia astuta, cruel, mentalmente sensible para todo tipo de patologías psíquicas, ambiciosa, curiosa, con el sentido del derecho para todo que puede ocupar. Un explorador y conquistador de primera. Basta con mirar a los dioses que ha inventado desde que los necesitó: son dioses antropomorfos, dioses que expresan la visión del Homo sapiens de sí mismo. Dioses incoherentes con sus deseos, sus rabias, sus reglas de vida, dioses celosos, vengativos y codiciosos. Dioses que mienten, engañan, traicionan, hacen trampas y matan a los inocentes para ayudar a sus favoritos — los que supieron endulzarles mejor: con los sacrificios de toda naturaleza. No es la fisiología, es la psicología.

Pero si hablamos de la fisiología, recordemos una vez más que el Homo sapiens poco a poco pobló la tierra acomodándose a diferentes condiciones climáticas. Siendo una criatura territorial, el humano tenía que proteger sus tierras, y buscar otras. Siempre, porque los recursos tienen tendencia de acabarse, en especial cuando todavía no los produces. En los grupos de los chimpancés modernos observamos este modelo del comportamiento: el patrullaje del territorio, los asesinatos de los intrusos, luchas y rivalidades internos por la posición jerárquica en el grupo.  

Los restos de los Homo sapiens prehistóricos cuentan las historias de las luchas sangrientas, y las muertes violentas, porque el mundo donde ellos vivían, fue frío y cruel: o matas tu, o te matan a tí. Y no hablamos de los tigres de dientes de sable, para aquel entonces, éstos ya no existían: en esos tiempos remotos, como ahora, el peor enemigo de un humano era otro humano.

Las comunidades nativas en diferentes partes del planeta que siguen viviendo de manera primitiva, son guerreros. En muchas de éstas, la violencia es intensificada al comparar con la vida de los grupos más civilizados. Les recomiendo un libro muy famoso en algún momento, para tener la idea sobre el estilo de vida de la gente prehistórica: Yanomamo: The Fierce People publicado por el antropólogoNapoleón Chagnon en 1967.

Guerreros asesinos del tribu Yanomamo, estado natural del Homo sapiens prehistorico

Yanomamo es la tribu que vive en los territorios venezolanos en estado social primitivo. Entre muchas cosas muy interesantes, Chagnon reportó que los guerreros-asesinos de esta tribu tenían más esposas e hijos que cualquier otro hombre de la comunidad. En la actualidad ya sabemos qué significa esto: precisamente las personas más violentas de esta tribu logran a pasar sus genes a otras generaciones de manera más exitosa. Ahora y en la edad de piedra, sobrevivían los que lograban matar antes que los maten, sobrevivían los más violentos, agresivos, y, para no olvidar de algo muy importante, más inteligentes. La inteligencia, recordemos, no tiene la connotación moral: la bondad, la capacidad de amar y perdonar hemos sacado de los almacenes genéticos cuando ya pudimos darnos lujo de poder perdonar al enemigo.

El ser humano necesita un territorio, necesita ampliar su hábitat, necesita explorar para que sus genes siguen reproduciendo. La necesidad de los humanos de tener su propio territorio es tan fuerte, que hasta después de la muerte, queremos tenerlo. Ya no existe la persona, pero sigue allá un pedazo de tierra, o de la pared que le pertenece solo a él o ella. Es por ello, que la protección de lo suyo en las etapas primitivas del desarrollo social se convierte en la prioridad.

Si alguien decida opinar sobre la violencia y la agresividad del Homo sapiens, podemos hacerlo en comentarios.

Ahora me gustaría tocar el tema de las posesiones: el mundo sin posesiones, es bueno o malo? Nuestra cultura es ante todo material, y nace de los primeros elementos que tienen los primates modernos también, por lo tanto, antes de poseer algo, hay que hacer algo. Si no hacemos nada, nos quedamos entre las ramas de los árboles. Es natural para un ser humano, querer tener sus propias cosas, así como su propio territorio. Nuestro territorio había sido fundamental para la supervivencia en algún momento, por ello  siempre lo buscamos, siempre lo protegemos poco a poco incluyendo en el concepto más y más elementos para formar naciones, países, imperios. Más compleja la estructura es, más detalles tiene. Una pequeña casa solo necesita una mesa y cuatro sillas. Una casa más grande significa más seguridad para la supervivencia, es más conveniente, pero a la vez, requiere más cosas y más esfuerzos, para construir, para cuidar y preservar.

Y así como no podemos culpar a nuestros cerebros que sabotean el deseo de dejar de comer en exceso, igual no podemos culpar en querer tener más y más cosas. Nunca es suficiente dicen. Nadie está conforme con lo que tiene. Bueno, no vamos a generalizar tanto, pero tiene mucho sentido: no podemos estar conforme, porque con el conformismo termina nuestra existencia. Para asegurar que eso no suceda, la evolución introdujo dentro de nuestros magníficos cerebros una serie de mecanismos que nos empujan ir más allá de los límites, crear las preguntas y buscar las respuestas sin cesar, salir a lo desconocido, y con dientes y garras defender lo nuestro.

Quizá me pueden preguntar: describes a los humanos desde un punto de vista bastante desagradable. Eres una misántropa? No. Soy realista y pragmática. Hasta cierto punto. Soy consciente de nuestra naturaleza y no me da miedo decir las verdades crudas, porque son crudas y hasta tétricas solamente si ya tienes una predisposición a afirmar que somos buenos. Bueno y malo son categorías culturales, y si las evitemos, y hablemos como naturalistas, el Homo sapiens es la especie más exitosa en cuestiones de supervivencia, y no es malo. Creo que es muy bueno. Aceptamos esto, y aceptaremos que los caminos a este éxito evolutivo no están hechos de flores y mariposas que tocan los violines y cantan los himnos.

Nuestra naturaleza es variada, es compleja, es frágil en cuestiones psicológicas, es adaptativa y siempre se refleja en nuestro comportamiento. Las mentiras, las bajezas, las traiciones, las crueldades, la violencia en muchas situaciones son naturales. Por otro lado, nuestra parte psíquica es vulnerable y puede tener un sinfín de trastornos los cuales no son normales, aunque se observan y existen. La agresión es natural, pero cuando llega al sadismo, es una patología. No podemos decir que es natural para un hombre o mujer disfrutar el dolor ajeno en las circunstancias normales. Pero solo imagínese una madre cuya hija de 5 años había sido violada y quemada viva. Qué sentiría ella al ver el asesino sufrir las torturas más crueles? Muy posiblemente que sentiría un fuerte dolor y a la vez, la alegría. Es normal? No. Es natural? sí.

Yo creo en la humanidad, porque somos muy diferentes. Hay valientes y cobardes, hay agresivos y pacíficos, inteligentes y brutos, nobles y tramposos. Nacimos con la predisposición genética que puede ser activada de manera muy diferente en dependencia con las circunstancias del entorno. Entre la gente, hay de todo. Yo creo en la humanidad porque, a pesar de nuestra naturaleza, somos capaces de suavizar sus manifestaciones. Esta capacidad nuestra es admirable, pero no milagrosa, porque es la respuesta a las exigencias de supervivencia en grupo. Sin embargo, estoy en contra de querer cambiar la naturaleza de manera artificial, imponiendo las reglas y criterios que van en su contra. Así como no puedes pedir a un pez que trepe el árbol, no puedes quitar a los humanos el derecho de reaccionar a las circunstancias de acuerdo con sus mecanismos naturales. Si experimentamos el miedo, básicamente tenemos dos opciones de reacción: huir o atacar. De qué depende cual opción escogemos? De nuestra predisposición interna, que combina los elementos fisiológicos y los aprendidos en el entorno social. Pero la fisiología, por general, gana. Cuando el peso de la formación social es demasiado imponente y inhibe lo natural, la psíquica humana se quiebra. Y a qué es capaz un Homo sapiens con trastornos de este índole, podemos ver en cada página de la historia de la humanidad.

Así que celebremos nuestra naturaleza sin avergonzarse de ella agradeciendo a nuestro cerebro que es capaz de generar lo peor y lo mejor mezclándolo en un alucinante juego de vida humana.

Publicada por primera vez 15 de marzo de 2019.


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21 comentarios

  1. Tienes toda la razón: es terrible cómo somos, pero somos así.

    Eso no significa que nos debamos conformar. Nuestra respuesta «natural» es la adecuada en un entorno «natural», pero creo que debe ser modificada por la cultura y la educación para adaptarse a un modo de convivir que no es «natural».

    El modo de vida «civilizado» es artificial, pero convendrás que si la humanidad no alcanza un nuevo estadio, se podría considerar un fracaso de esa civilización. Y seguiríamos por el camino que venimos hacia la extinción.
    Ojo: que no pasará nada el dia que la humanidad se extinga. Somos una gota insignificante en el universo.

    Dicho esto, conocer como tú muestras, la cruda realidad de cómo somos por dentro no nos tiene que llevar al conformismo sino a tomar conciencia de ello y llevarnos a su superación.

    Gracias y un saludo

    n cualquier caso

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    • MIL VEZ DE ACUERDO CON USTED 🙂 la civilización cualquier que sea, no tiene un objetivo, así como la evolución. se avanza siguiendo las reglas, pero nunca llega a un objetivo final. la civilización termina si termina la evolución, pero la evolución solo termina con el fin del mundo organico 🙂 gracias por su interes!!! me encantó su comentario, què gusto encontrar personas con quines compartir las ideas !!!

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  2. Tu exposición me ha llevado a sentimientos encontrados. pero no me siento incomodo. Primero, «Imagine» es recuerdo de los veranos de juventud en las playas de barranco corriendo las olas. Mi romanticismo no me permitía ver más allá de mis narices y creíamos en ese movimiento sin cortapisas. Añoranza con un dejo de tristeza por esos momentos que se pasaron muy a aprisa. Luego viene la parte del libro de Napoleón Chagnon, conocido como «Un antropólogo feroz «. Conocí el libro, lo leí a medias, sólo para completar un trabajo de colegio de mi hijo. En el 90, Chagnon quiso seguir estudiando a los yanomamis pero su acompañante, antropólogo venezolano (Brewer-Carías) se dedicó a comprar tierras en ese territorio para explotar el oro ( se cumple tu teoría del homo sapiens) y Chagnon fue expulsado del país. Así que nos quedamos a media de saber más de esta tribu. Lo cierto es, ante mi escaso conocimiento de la psicología, fisiología y basándome en el sentido común, nuestra naturaleza humana viene condicionada desde hace miles de años. Y ahora le encuentro explicación a todos los desbarajustes de esta moderna sociedad en que nos tocó vivir. Cada escrito tuyo es un aprendizaje de vida así tenga que estar usando el diccionario y libros para entenderte mejor. Ya voy por la tercera lectura y sigo encontrando conceptos nuevos. Que tengas un año estupendo con el 2020. Saludos

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    • cuando leo comentarios como el suyo,siento que sí era buena idea de republicar. gracias por tantas detalles adicionales que al venir de alguien quien experiementó estas ideas, confirman y completan el texto 🙂 gracias por hacerme saber que le es útilo lo que hago y lo entretiene y llena de conocimientos nuevos. es tan valioso para mi. y sí, ya es 29 de diciembre y estamos en las vísperas de 2020 🙂 que tenga usted muchos momentos de alegría y felicidad, que goce de salud y pase el año motivado e inspirado!!!

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  3. Tiene usted mucha razón Alona, entre los humanos continúan habitando seres de la peor especie, así que la castración y la pena de muerte encuentran su justificación en los peores actos. Quizás por eso la mejor esperanza para la evolución esté más en la educación y la justicia, que en la religión que a menudo propugna la eliminación física de los infieles. Un abrazo.
    Según Marija Gimbutas el neolítico comienza con una civilización matriarcal desaparecida de orden pacífico.

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    • hay muchas hipotesis, pero es dificil comportbarlas porque las evidencias culturales desaparecen si no estàn hechas de piedra, por lo tanto solo podemos contar con algunos rasgos que se conservaron a lo largo de los milenios. mi opiniòn particular de Homo sapiens no es la de las mejores 🙂 nosotros tenemos potenciales creativos pero nuestra caracteristica numero uno es nuestra capacidad de supervivencia, lo cual en un organismo tan fragil como nuesto, significa ser una bestia astuta y cruel. sino, el mundo te come 🙂 un abrazote!!!

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  4. Reblogueó esto en En la diversidady comentado:
    Yo creo en la humanidad, porque somos muy diferentes. Hay valientes y cobardes, hay agresivos y pacíficos, inteligentes y brutos, nobles y tramposos. Nacimos con la predisposición genética que puede ser activada de manera muy diferente en dependencia con las circunstancias del entorno.

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  5. El ser humano tan complejo como diverso…indudablemente describes magistralmente una parte de sus características, pero… podemos negar como ha influido el amor con todas sus manifestaciones (empatía, solidaridad, sacrificio…) en la configuración de lo que somos en la actualidad?¿Sería erroneo el atribuir al ser humano una evolución en sus comportamientos por medio de la educación? Ciertamente esto solo puede ser factible en un mundo que permita desarrollar estas cualidades…hagamos posible ese mundo!!!…un placer leerte

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  6. Vaya, esto que acabo de leer es fuerte, y si; tienes razón, es verdad, prima el instinto de supervivencia. Pero como alguien ya lo mencionó. Donde queda el amor? En todo esto? Sería muy interesante leer tu punto de vista al respecto. Como siempre lo haces con tus fundamentos bien claros. Un gusto leerte.

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