ESTRESSSSS: somático y vegetativo

Más que el colesterol y el gobierno mundial nos asusta la palabra estrés. No hay nadie quien no sepa que el estrés nos enferma, envejece y mata. ¿ Será cierto? Veremos.

El estrés en naturaleza es una situación externa potencialmente peligrosa para nuestra salud y vida. No más ni menos que esto. Sé que para ti, mi querido lector, el estrés significa algo muy diferente, pero las diferencias surgieron junto con nuestro desarrollo cognitivo. Para prever, evitar, encarar el peligro y protegerse en en estas situaciones, evolutivamente desarrollamos todo un sistema de reacciones al estrés que nos permiten reaccionar y tratar de salvarnos. El sistema nervioso vegetativo se encarga del cuerpo sin la necesidad de tomar decisiones conscientes: la conciencia es muy lenta para cumplir las tareas de supervivencia. Conscientemente podemos decidir movernos o no, y eso sirve para la vida: si queremos, escribimos, si no queremos, no abrimos los ojos, si nos da la gana, bailaremos solos frente al espejo, si no nos da gana, no limpiaremos el piso. En este nos ayuda el sistema nervioso somático. Con su ayuda también controlamos algunas cosas fisiológicas como la defecación, las erupciones , la expulsión de orina que no son bien vistas por el entorno y que aprendemos a manejar en infancia temprana. Pero no podemos controlar la digestión o sudoración porque de estos procesos se encarga el sistema nervioso vegetativo. El sistema nervioso vegetativo tiene todo para activar la reacción al estrés. Una parte de éste, el módulo simpático, se activa; y el otro, el parasimpático, se frena casi por completo. Los nervios que pertenecen al sistema simpático llegan a cada órgano, cada vaso sanguíneo, cada músculo por más pequeño que sea.

¿Recuerdan cómo se erizan los gatos asustados? Es el trabajo del sistema simpático. Lo mismo pasa con nosotros, solo que no se nota 🙂 así que de miedo nos cubrimos de piel de gallina. 
El sistema simpático entra en acción en las situaciones emergentes de un peligro potencialmente mortal. Nuestras reacciones simpáticas, que no se controlan por la conciencia, nos ayudan a ponernos alertos, movilizados para acción y con sentidos agudizados.  Paralelamente con esto, se desactiva el sistema parasimpático para no entrar en conflicto interno y dejar al cuerpo actuar de manera óptima. Gracias a la adrenalina y la noradrenalina que se producen en las glándulas suprarrenales, el corazón empieza a latir más rápido, se abran las pupilas, deja de funcionar el tracto digestivo (recordamos, el parasimpático está inactivo) por lo cual se nos seca la boca, se deja de procesar la comida por todo el largo del tracto — no hay tiempo!!! se desactiva la producción de ciertas hormonas relacionadas con el área reproductiva — qué importa el amor, primero hay que salvar la vida!!!! Dependiendo de nuestra construcción fisiológica individual podemos atacar, pelear, correr para escapar o llorar. Por cierto, el punto final del sexo es gobernado por el sistema simpático también 🙂 y sin éste no tuviéramos orgasmos, pero antes del orgasmo, el sistema parasimpático hará su magia de la excitación. 

Bueno, pensando en nuestro pasado de hace unos 65  millones de años, 7 millones de años, 2 millones de años, 200 mil años, 10 mil años (una gotita en el río de evolución) la situación de estrés es breve: tu corres o peleas, o lloras máximum un par de horas, y luego, o te salvaste, o ya moriste. La cadena de las reacciones al estrés no es larga. Luego si te salvaste, necesitas descansar y recuperar tus energías, ayudar al cuerpo curar las heridas y para ellos, al acción entra el sistema parasimpático.  En naturaleza. Hace 10 mil años. 

Ahora, mi querido lector, sinceramente, ¿estás estresado? ¿Y cuál es el peligro mortal que enfrentas ahora? 

¿Un oso? 

¿Un incendio? 

¿Un ataque del tribu neandertal?

Coméntame, qué te estresa y seguiremos hablando de cómo algo hecho por la evolución para salvar nuestras vidas se convierte en nuestro asesino. 


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20 comentarios

  1. De joven tuve que aprender a dominar el stress, mediante entrenamiento intensivo para situaciones críticas, y me ha venido muy bien toda la vida. Ahora pueden explotar cohetes a 10 metros de mí y no me afecta, mientras la gente grita yo sigo leyendo un libro. En cuanto a la vida en sí, es más o menos lo mismo. Lo único que me estresa son ciertas situaciones personales relacionadas con experiencias pasadas, que me marcaron profundamente. Stress postraumático por ciertos hechos, que resuenan una y otra vez en mi cabeza sin poderlo evitar. Pero, como todo en la vida, la mente aprende a gestionarlo. Un abrazo.

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    • gracias, Fernir, por compartir, cómo me gustaría tener la resistencia que logró usted a cultivar en sí. hablaremos de todos los aspectos de estrés y todas sus formas, de lo posible. por ejemplo, lo de situaciones personales: nos estresa algo que en realidad no es un peligro para la vida, pero nosotros mismos, siendo criaturas complejas y, encima, sociales, ampliamos la lista de los contextos para el estrés sin tener cambios mínimos en los mecanismos de la reacción. allá mismo nacen nuestros problemas. hubo un dramaturgo rus muy famoso en el sigol 18 que escribió una obra con el título El mal de la razón ( la traducción, creo, no refleja su sentido profundo, yo lo traduciría: mil desgracias por ser demasiado inteligente :)) creo que es una etiqueta del ser humano 🙂 muchos de nuestros males vienen de nuestra cognición que con su poder de atribución nos hace vivir las vidas que no son reales biologicamente hablando 🙂

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      • Gracias a usted por sus palabras. El hecho de soportar el stress no es tanto no sentir una fuerza negativa, como poder controlar esa fuerza negativa, y poder gestionarla, racionalizarla, y convertirla en algo manejable por la mente. Las artes marciales fueron fundamentales en ese aspecto, gracias a ese aprendizaje pude superar etapas difíciles. Y reitero mi agradecimiento por sus palabras.

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  2. Felicitaciones por el tema. Es stress es algo que aun no terminamos de entender. Tampoco somos conscientes del gran daño que causa. Personalmente, estoy practicando la respiración de Win Hoff, el hombre de hielo, sus efectos son muy buenos. Gracias por recordarnos su importancia.

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    • gracias, Carlos, en las siguientes partes trataré de explicar las implicaciones fisiológicas y los daños con las consecuencias sobre nuestra salud, fertilidad y la duración de la vida. también llegará el momento para dar algunas sugerencias como disminuir los efectos negativos de estrés prolongado, cómo enviar el estrés prolongado y cómo desviarlo en caso si surge

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  3. La sofisticación de la supervivencia: El estrés de ser despedido en un entorno de crisis económica, pues ya sabes que debemos tener ingreso para obtener recursos básicos. Como bien mencionas, el poder de atribución nos permite elaborar escenarios (Adversos o favorables), según los cuales podremos o no manejar el estrés. En México, decimos que tomamos nuestra «pastilla de valemadrina» o que todo «se nos resbala», es decir, dejamos de preocuparnos deliberadamente por ciertas situaciones, incluso las más graves. En mi caso, escribiendo ha sido siempre el mejor remedio. Abrazote…

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    • sí!! hay un montòn de personas que aprendieron manejar el estres sin ninguna ayuda ni consejo externo, son las personas afortunados que conocen a si mismo. yo desde la adolescencia sabia que me cura de cualquier estres el estar sola por un tiempo y leer 🙂 . en mi vida adulta màs de una vez pedì descanso mèdico por algo que podrìa superar sin èste, y me quedaba dos a tres dìas envuelta en las mantas de alpaca bebè leyendo libros y tomando rico tecito 🙂

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  4. Hola querida Alona! Siempre me doy un tiempecito para leer tus artículos tan interesantes! Bueno, en esta oportunidad tocó hablar del estrés, realmente te felicito pues hay algunas cosas que yo desconocía por ejemplo que estamos gobernados o regidos por el sistema vegetativo, el sistema nervioso central y el otro se me olvidó, jejeje, es que a veces me cuesta recordar los nombres científicos, jijiji. Pero de todas maneras gracias por ilustrarnos siempre con claros ejemplos e imágenes como aquello de que cuando el gato se asusta, se le erizan los pelos, o aquello que cuando estamos ante un peligro, reaccionamos de manera rápida por el cuerpo mismo (en la cual no actúa la conciencia) de querer salvarnos a como de lugar. Si me gustó tu artículo, veo que cuidas mucho en usar las imágenes adecuadas para llegar al punto, eso dice mucho de ti mi querida Alona, realmente te admiro, escribes muy bien sobretodo porque eres conocedora de la parte científica.

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  5. Realmente muy interesante e ilustrativo. Seguimos aprendiendo sobre esta maravillosa maquina llamada cuerpo humano. Te felicito por la manera tan sencilla y clara con la que nos das a conocer estos datos tan importantes.

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  6. Gracias Alona, creo que tigres aparte, la sociedad en general se encarga de establecer las condiciones para mantener bajo presión laboral a los humanos susceptibles de padecer ese mal, a los otros, a los incapaces de sufrir preocupaciones, no les suelen adjudicar responsabilidades. El sistema les mantiene aparte. Un saludo.

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    • gracias, Carlos, sí, hasta ahora es de moda vivir bajo estrés y uno de los reqauisitos indespensables laborales es saber (y disfrutar ) trabajar bajo resión. triste porque sí la presión es parte de cualquier trabajo, pero bajo la presión uno no es productivo a cabalidad. si lo sabes hacer, bien por ti, tu serás que tendra gastritis, impotencia y diabetes a largo plazo, pero que en las condiciones tranquilas puedes trabajar mejor, és más que cierto. un abrazo, Carlos, lo estaba echando de menos 🙂

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      • Muchas gracias Alona, a veces viajo a la Costa da Morte, una preciosa región al noroeste de España, donde la cobertura del celular es muy deficiente. Como usted creo que el trabajo debe ser un punto esencial para disfrutar de una vida feliz.

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