BAJO MI PIEL: homúnculo cortical

La piel es nuestro instrumento para explorar el mundo, mucho más poderoso que podemos imaginar. Su papel es especialmente significativo para la biología de nuestra especie ya que el contacto corporal para los humanos es el elemento indispensable para la comunicación. Y como ya sabemos, la comunicación con seres iguales es lo que nos hace humanos. Las reacciones al grooming ( aquí puedes leer el texto completo sobre el significado del grooming para nosotros) que permiten limpiar el cuerpo de los parásitos y las suciedad, en los primates se transformaron en el medio de comunicación. Tocar a alguien en tu manada es enviarle una señal comunicativa positiva, acariciar o piniscar es expresar tu sentir sin hablar. El famoso doctor mexicano, Paul Bach-y-Rita, el pionero en la investigación de la plasticidad cerebral(y mi héroe!!) , propuso el concepto de la sustitución sensorial que básicamente permite a las personas ver con la piel. Pueden recordar la infancia y pedir que alguien les dibuja las letras o números en su espalda y ni siquiera van a sorprenderse con que facilidad las sensaciones de tacto se transforman en su cerebro en la información simbólica del lenguaje. Veremos cómo se procesa la información que recibe la piel del mundo exterior. 

Como ya sabemos de la primera parte, en el tálamo se unen las señales que llegan por los nervios esqueléticos y faciales  y en su núcleo ventral posterolateral (recordamos que el tálamo tiene varios núcleos) aparece el cuadro completo de la superficie de nuestra piel, un pequeño mapa dividido en zonas del tronco, de la cabeza, de las manos y de las piernas con sus pies :). El tálamo filtra y da su VªBª para que la info pase a la corteza cerebral, donde las señales se analizan en el lóbulo parietal. Para imaginar dónde está pongan su mano a la corona de la cabeza y deslicen hacia abajo – es allí donde pasa la cesura central y exactamente detrás se ubica el mapa cortical de la sensibilidad de la piel. Los neurofisiólogos lo llaman homúnculo cortical, porque este mapa tiene forma de persona, pero bastante rarita, ubicada cabeza abajo: arriba están las zonas de los pies, luego piernas, luego el tronco, luego va una enooorme zona de la mano, donde cada dedo tiene su lugar bien definido. Primero va el dedo meñique y luego lo siguen el resto. Luego va la zona de la cabeza y, aunque todo el homúnculo está cabeza abajo, la cara se pinta desde la frente hasta el mentón, seguidos por la lengua y la garganta, muy pegadas a la zona de la sensibilidad gustativa así que , muy consecuentemente, la zona de la lengua se pega a la zona gustativa para darnos las sensaciones muy completas de los sabores, texturas y temperaturas de la comida.  

El mapa cortical de la superficie de nuestra piel tiene proporciones alteradas, visualizadas en las imágenes que pueden ver en esta publicación. Las áreas donde la señal se lea más exacta, más detallada, por ejemplo, de la yemas de los dedos, los labios o lengua, son muy grandes porque se necesita más neuronas para el análisis. En la espalda hay menos receptores, así que hay menos neuronas para procesar las señales que vienen de allá, y el área de espalda en el mapa cortical es más pequeña. Otros animales tienen sus mapas corticales de la piel muy diferentes a nosotras. Por ejemplo, las ratas tienen las zonas de sus vibrisas realmente grandes tanto que los neurofisiólogos lo llaman ratúnculus.

EMOCIONES

A parte de la corriente informativa, la sensibilidad de la piel tiene tambièn el componente emocional que, como ya sabemos, es sumamente importante para los seres humanos. La interpretación emocional realiza el hipotálamo ( aquí un texto completo sobre el hipotálamo ). El hipotálamo puede generar las reacciones emocionales, positivas o negativas, y estas respuestas pueden ser bastante complejas y, a menudo, hasta contradictorias, porque, por ejemplo, si el sabor dulce les gusta a todos, o el olor a podrido es feo para todos, el mismo contacto corporal, el mismo toque en diferentes contextos puede tener muy distintas consecuencias: una cosa que te acaricia tu enamorado, y otro, que alguien ajeno lo haga , y sin tu permiso. Los besos que damos a la gente querida, los besos fraternales, o pasionales, o de ternura, son actos inconscientes muy naturales en nosotros que delatan nuestra biología. Un beso puede expresar mucho amor y alegría, y en otros contextos significar la traición. los humanos somos muy sencibles a esta información que en algunas situaciones no es conciente. La piel es la que contribuye en la formación de nuestras respuestas intuitivas.

Nuestra piel nos protege, nos orienta en el mundo físico y emocional y puede ser la fuente de las emociones positivas: los masajes el aseo, el caminar descalzo, el tocar — son cosas simples que nos pueden llenar de la sensación de bienestar. Así que recuerden qué tan grande representación tienen las manos y labios en nuestros cerebros y traten de darles un buen uso mientras la sangre viva corre por sus venas. Recuerden que la felicidad està también en nuestra biología y siendo subjetiva puede ser generada por pequeñas acciones conscientes.

Resultado de imagen para masaje relajante de los pies

10 comentarios

  1. Esta es la gran diferencia entre cualquier contacto online y el contacto directo. Por mucho Internet y mucha realidad virtual, el contacto físico directo no puede compararse con ninguna tecnología. Eso es lo que nos hace realmente humanos.

    Le gusta a 2 personas

  2. Ayyy!!! Me ilusiona mucho esta información…. en mi última entrada aparece mi intento de dibujar el homúnculo de Penfield… jaja, entre otras cosas!!!!
    Me gusta mucho cómo presentas un contenido tan interesante, como es el cerebro humano.
    Ánimos

    Le gusta a 1 persona

Deja un comentario