INFIDELIDAD: dos versiones del mismo hecho

Sin querer voy al tema de los géneros una vez más. No tanto desde el punto de vista neurocientífico, cuanto desde la perspectiva de la evolución de la especie. Aunque son dos ramas estrechamente conectadas y mutuamente complementarias cuando de entendernos se trata.

Como ya hemos visto, el sexo para las mujeres y hombres tiene un significado e implicaciones diferentes, pero qué tal la infidelidad dentro de una relación estable, que culturalmente definimos como matrimonio? Si las tareas reproductivas están guiadas por las funciones que desempeñamos en la reproducción, entonces será fácil de ver las perspectivas hacia el rompimiento de las promesas sagradas y las escapadas a otros brazos, ajenos a la familia.

Un hombre necesita depositar su material genético dentro de una mujer para que ésta se encargue de gestar y parir el fruto de amor, el pasaje a la inmortalidad genética de ambos: ella y él. Evolutivamente se confirmó que las crías de una pareja tiene más probabilidad de sobrevivir que las de una madre soltera, así que el hecho que los hombres se encargan de la mamá y los hijos es bastante predecible para una criatura tan inteligente como nosotros. La mamá a su vez necesita retener al padre por los mismos motivos: ella necesita que la protegen y alimentan mientras está atada al bebé.

Por su puesto, la realidad actual es muy lejana del contexto prehistórico de las cuevas y mamuts, pero los programas que se formaron durante varios millones de años siguen vigentes y dirigen nuestro comportamiento.

Sabemos que la infidelidad se divide en dos categorías las discución de las cuales vuelve locas ante todo a las mujeres. Hay escapaditas, y hay romances. Las escapaditas básicamente se tornan alrededor del sexo aventura, descartable y simple. Normalmente, la pareja no se entera de éstas. Los romances se tratan de amores, pasiones y tragedias, en especial, en el momento de la revelación.

Qué tipo de la infidelidad femenina más teme un hombre promedio? Sin duda alguna, a las escapaditas. Porque la escapadita potencialmente significa la posibilidad de crear un hijo ajeno y quedarse biológicamente anulado. Un hombre promedio definitivamente prefiere llorar una sola vez y permitir que la mujer se queda con su nuevo amor: él prefiere que ella se enamore de alguien y se vaya que le saque la vuelta con alguien sin sentimientos, por golosa.

El caso de la mujer, como ya pueden imaginar, es muy opuesto. La mujer siempre sabe que su hijo es su hijo. La infidelidad de su pareja no afecta su propia reproducción, en especial, cuando ya tiene hijos. Lo que teme una mujer ( recordemos: inconscientemente, o,  intuitivamente que a lo largo es lo mismo ) es quedarse en el mundo frío y cruel sola, sin el apoyo ni la protección, atada a un hijo y finalmente, morir juntos. Por lo tanto, una mujer promedia, en especial con la formación más o menos tradicional, puede cerrar los ojos a las travesuras de su marido si sabe que su hogar no esté en peligro. Lo que teme ella es que el hombre se enamore y la deje.

Así que la expresión material de estos programas — los celos — se manifiestan de diferentes maneras en los géneros. La mayoría de los hombres quieren saber la verdad para de una vez irse, y una mujer promedia más se inclina a lo que si los ojos no ven, el corazón no siente. Ella se alerta cuando intuye que las escapaditas se canalizan hacia una sola persona. Es cuando realmente empieza la guerra. El hombre, a su vez, si no se controla, puede llegar a enfurecerse con cada mirada que recibe su mujer en la calle. Por supuesto, hablamos de las tendencias generales, aunque sus expresiones individuales fluctúan enormemente.

Y ahora ya podemos explicar por qué los hombres siempre dicen que la infidelidad masculina no es lo mismo que la femenina: ellos saben qué sienten cuando tienen sexo insignificativo emocionalmente para ellos y qué dolor les causa imaginar que otro hace lo mismo con su mujer, y ésta sale embarazada, y lo hará creer que es su hijo, y que finalmente termina su vida sin transmitir sus genes a la eternidad. Creo que tienen razón.

Por supuesto, todo esto, como en en la parte anterior donde hablamos del tema, se torna alrededor de nuestra biología desde el punto de vista evolutivo y los programas instalados en las partes pre-corticales del cerebro cuyo funcionamiento no depende de nuestra educación y la cognición. Los patrones sociales pueden suavizar o intensificar estos programas, pero no los pueden eliminar por completo.

Espero este texto les ayuda a entender un poco más a sí mismo, y a la gente alrededor para su creciente e interminable felicidad.

This work is licensed under a Creative Commons Attribution-NonCommercial-NoDerivatives 4.0 International License.

26 comentarios

  1. Este es un campo muy interesante, donde la moral y la ética humanas, así como las ideas religiosas, chocan frontalmente con la realidad evolutiva y adaptativa del ser humano a la realidad biológica. Y esa realidad difiere considerablemente de usos y costumbres ancestrales que se mantienen actualmente, y que van en contra de la naturaleza humana. De ahí la larga serie de conflictos que, si se tratasen de forma rigurosa y científica, serían mucho menores. Un cordial saludo.

    Le gusta a 2 personas

  2. La infidelidad es algo inherente al ser humano independientemente al genero. Hablar solo sobre ella nos llevaría por miles de vertientes que nos disgregarían. Las causas podrían ser innumerables, y todas aceptables. No es mal de morir, nadie es imprescindible, pero hablar solo de infidelidad nos distrae de los temas verdaderamente importantes; la deslealtad, la mentira, la traición,y el engaño.
    Salud.

    Le gusta a 1 persona

    • claro, la fidelidad también tiene un abanico de facetas culturales, que requieren un analisis de cerca, por ahora solo me centré en la base evolutiva que tiene una directa relación con la biologia humana. gracias por la visita. siempre esta super bienvenido.

      Le gusta a 2 personas

      • sí, siempre la cultura cambia nuestra forma de pensar. somos seres sociales, sin otros humanos y el ambiente social no podemos formarse. es nuestra fuerte. sigo contenta, por ejemplo, por la noticia sobre la primera imagen de un agujero negro. es lo que puede hacer la fuerza colectictiva de los cerebros humanos. demás decir, que las cruzadas y el matrillo de brujas, también lo es.

        Le gusta a 2 personas

      • no es una foto, es un resultado de los procesamientos complejos de la información recibida por diferentes vías. igualito como lo hace el cerebro. malo no, porque nuestra realidad es la que podemos percibir. y si vemos la luz de una estrella que ya no existe, que pena por la estrella.

        Le gusta a 2 personas

      • claro, lo entendí. es cierto que tenemos limitaciones pero esto nunca nos para, claro, refiero a los humanos, por ello ahora solo logramos visualizar el agujero negro, que, quizá, como usted dice, ya no existe, aunque creo que sí, más adelante caminaremos en sus bordes, atravezando sus enigmas. bueno, hablo metaforicamente.

        Le gusta a 1 persona

  3. ah el mono desnudo¡ y… la ifidelidad de la mujer quiza sea resultado para concretar su maternidad.. xcelente texto, me darás permiso de ponerlo en Sendero blog? Abrazo y rosas amiga.
    Pe
    Y si hay cincomujeres y un varon, es posible tener 5 productos, pero si es a la inversa, habrá solo uno, la variable de la perpetuación de la especie, seguramente toca a la infidelidad. Será?

    Le gusta a 1 persona

    • definitivamente, pero las sociedades poliandricas son así de acuerdo con el entorno cultural formado en bases económicas: sociendades muy cerradas, con escasos recursos y muchas dificultades para la supervivencia, como en el Tibet. pero naturalmente nos inclimnamos al modelo de un marido y varias mujeres. gracias por visitarme. le envio un abrazo en la distancia.

      Le gusta a 1 persona

  4. En algunas sociedades primitivas los hombres no se preocupan por la patrilinealidad, la matrialinealidad es lo único seguro y en actuan conforme esa certeza. La patrilinealidad surge en la gen griega, para asegurar la «propiedad privada», así como en todas las sociedades patriarcarles. Saludes.

    Le gusta a 1 persona

  5. Muy interesante, sobre todo porque lo estás escribiendo desde la perspectiva femenina. En muchas ocasiones nos centramos más a nivel masculino y olvidamos el femenino, dos universos. Gracias por tu artículo. Un abrazo

    Le gusta a 2 personas

Deja un comentario