DEFAULT MODE NETWORK: gente que vive en mi cabeza

En la primera parte mencioné que la Red Neuronal por Defecto se forma en la corteza cerebral, uniendo cuatro puntos principales dos de los cuales se ubican en el lóbulo frontal, en el área prefrontal, la misma que demora en madurar más que cualquier otra parte del cerebro, otro, en el lóbulo parietal , y, el último, en la corteza del giro cingulado. Algunos científicos también consideran la parte de la corteza entorrinal como un elemento de la RND. Estas palabras complicadas asustan un poco, pero los que desean visualizar la red, las necesitarán para orientarse.

Esta red está presente en los cerebros de otros animales, pero hoy no hablaremos de ellos. Hoy solo veremos qué papel juega la RND en nuestra vida social. Y sabremos por qué para los humanos la frase vida social es el sinónimo de la palabra vida.

La RND trabaja cuando el sistema cerebral ejecutivo se encuentra en inactividad. Es cuando en la ausencia de los estímulos externos, nuestro cerebro vive la vida interior. Y, por supuesto, corrígeme si no tengo razón, estos pensamientos que vagan sin tener el propósito para nuestra vida exterior, se tornan alrededor de otras personas, de nuestras relaciones con ellos, de sentimientos y conflictos, de sueños y recuerdos.

En este estado y yo, y todos ustedes, mis queridos lectores, pasamos 46 por ciento del tiempo. Quitando un promedio de 8 horas que vivimos durmiendo, estamos hablando de más de 7 horas de la desconección del mundo exterior. Sin embargo, no sentimos que ausentamos de la vida, porque la vivimos y vivimos plenamente, pero en el interior de la RND.

Guiados por la RND, nos encontramos con muchas personas, hablamos con ellas, discutimos, podemos incluso pegarlas o besarlas, o cocinar para ellas o nadar junto a ellos en el mar transparente de Sirius o Nibiru. Pensar en cosas buenas que nos hicieron y los beneficios que podemos tener en futuro, imaginar qué podríamos regalarlos y cómo reaccionarían. Pensar cómo podría oler su piel si nunca lo supimos, o recordar el olor tan claro como si estuvieron en nuestros brazos.

Pensar en cosas buenas que nos hicieron y los beneficios que podemos tener en futuro, imaginar qué podríamos regalarlos y cómo reaccionarían. Pensar cómo podría oler su piel si nunca lo supimos, o recordar el olor tan claro como si estuvieron en nuestros brazos.

Son diferentes personas, diferentes emociones, sensaciones, ideas y pensamientos. Se estima que podemos retener alrededor de 150 personajes diferentes teniendolos al alcance del pensamiento, sabiendo quiénes son, cómo son y cuál es nuestra relación con ellos. El número sale directamente de las investigaciones de Dunbar sobre la correlación entre el volumen de la neocórtex cerebral y el tamaño del grupo de los individuos con quienes interactúa el personaje.

De esta manera sabemos que dentro de nuestra cabeza viven como 150 personas cada uno de las cuales son pura creación de nuestro cerebro. Cómo así? Claro, las personas en nuestras cabezas son nuestras ideas sobre ellas. Cada persona que conocemos trae consigo su historia, la cual creamos y recreamos nosotros. Esta historia puede tener mucho en común con la realidad, o muy poco. Por ejemplo, en mi RND está Robert Sapolsky.

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Nunca lo vi en persona, pero paso horas escuchando sus clases y leyendo sus libros. Sé como luce y cómo lucía hace años. Conozco el tono de su voz y la melodía de su risa. Pienso que es una persona amable, sensible, alegre y puedo imaginar cómo es hablar con èl.  Pero así es Robert? Puede ser que sí, puede ser que no. También podemos imaginar que me choco con una mujer agresiva en el supermarket, me mira mal, quizá me dice algo desagradable y dos horas después yo sigo haciendo vueltas a la cabeza discutiendo con ella, imaginando cómo le hago ver que es maleducada, grosera, malcriada… en mi RND ella puede quedarse por semanas si realmente me afectó, y cada vez cuando la recuerde, voy a imaginarla así. Pero será cierto? Así es esta mujer?

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Quizá una mujer adorable ha tenido un mal día primera y última vez en su vida, y justo se topó conmigo. Quizás, ella tambièn sigue pensando en mí con el arrepentimiento y vergüenza por su mal actuar. Nunca más nos veremos, pero cada una por su lado puede dedicar horas, días o semanas interactuando con la otra en su RND. Mi Robert Sapolsky, mi mujer grosera de supermarket, mi jefe que siempre es amable conmigo y me ha ayudado tanto, pero a quien a duras penas veo una vez al año en persona, y 140 y pico más personas viven en mi cabeza, recreadas por mi mente para encajar en el único mundo que conozco, mi mundo.

Están ubicados jerárquicamente de acuerdo con su importancia para mi en general, o en algún periodo especial.  Es nuestra tribu personal. Aquí tenemos nuestros padres, amigos, parejas, hijos, hermanos, colegas, enemigos mortales, heroes, idolos, nuestro primera amor que se fue hace años, cantantes de rock o pop que nos gustan, los científicos o artistas cuyas obras tienen un efecto especial en nosotros. Las personas cuya presencia en nuestra vida interior y exterior determina nuestra interacción social.

Normalmente, cada persona tiene en la RND su paquete de la gente con quienes se relaciona. Estas personas pueden no ser importantes para nosotros directamente, pero aun estar allá siendo parte de nuestra vida interior: quizá el padre de mi amiga no me cae bien, pero lo tengo en mi RND junto con mi amiga.

Nuestra RND es un mundo virtual de los personajes basados en la vida real, así como en las películas. Y a lo largo, para nosotros lo que vale es el file creado por el cerebro que las personas mismas en el mundo real. Muy conocido cuando nos dicen que el chico que nos guste es vago, mujeriego y tonto. Pero nosotras ya imaginamos que es el príncipe con la armadura brillante y si alguien dice cosas diferentes, es porque el mundo no llegó a entenderlo.

El ejemplo más gráfico aún, creo, es de la película Náufrago en la cual el protagonista antropomorfiza a una pelota y construye una especie de relación y el lazo emocional con este objeto. En su RND la pelota toma vida y ocupa un lugar importante. Así que, 46 por ciento del tiempo que pasamos despiertos interactuamos con personas que solo existen en nuestra mente. No siempre son interacciones verbalizadas, pueden ser imágenes, sonidos y otras formas muy individuales para cada uno.

De esta manera también se forman nuestros estereotipos mentales, muy cómodos para el cerebro en sentido de economía de recursos. Menos complejo es el modelo que tenemos por persona en el cerebro, más personas pueden entrar. Es por ello que actualmente, el número de Dunbar puede ser elevado hasta  más de 200, lo cual no indica la ampliación de nuestras capacidades sociales, sino, la simplificación de éstos. Biológica y evolutivamente podemos lidiar con 150 personas de manera profunda y socialmente efectiva, con el grado de cercanía relacionado con la importancia de esta persona para nuestra vida. La RND también funciona con este principio.

La RND se formó gracias a nuestra forma grupal de existencia. Aparentemente, los primates superiores utilizan esta red para controlar el principio de la equidad en su grupo.

Los primatólogos comentan que los chimpancés, por ejemplo, tienen una idea muy clara sobre la frecuencia, la duración y la distribución del grooming realizado por diferentes miembros del grupo y se deduce que su RND se encarga de esto. Parecería que cada primate tiene en su cerebro un archivo personal con las tarjetas especiales para cada miembro, en el cual se registran las actividades sociales, buenas o malas desde el punto de vista de la supervivencia del grupo y la supervivencia individual. Eso nos sugiere que no es una red neuronal pasiva, sino, muy activa e importante.

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La vida humana tiene un complejo de las diferencias fundamentales que nos separan del resto del mundo animal: somos capaces de abstraernos de la realidad y crear un mundo abstracto, ideal en el interior de nuestra psiquis, compartirlo con otros y utilizarlo para reconstruir el mundo real. Si los primates mantienen en su archivo interior a los individuos que existen enfrente de ellos, los humanos creamos todo un mundo poblado de los personajes que van y vienen de acuerdo con lo que queremos sin la necesidad de tenerlos presente. Leyendo un libro, en nuestra RND vamos a dar vida a los personajes inventados por otra persona, y pensaremos en ellos incluso después de terminar el libro.

Solemos  hablar con nuestros seres queridos que dejaron de existir y nuestra conciencia percibe sus caras, escucha sus voces como si estuvieron aquí mismo.Nuestro cerebro juega la vida, y somos el producto de este juego. La conciencia sólo observa los juegos y saca sus conclusiones.

La vida social es la esencia de nuestra existencia, su propósito y su fin. Y si no hay nadie alrededor, siempre podemos inventarlos.


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10 comentarios

  1. A veces tiendo a recrear situaciones vividas durante el día como tratando de entenderlas mejor y quizás darme cuenta si tome la decisión correcta o pude hacerlo de otra manera.

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  2. Muy interesante todo esto, mucho.Llevo saltando de post en post un buen rato…

    150 personas dices?! hmmm… o unas 200 en la actualidad (dices) aunque de un modo mas superficial… Algo así como si necesitáramos o tuviéramos un máximo posible de información asimilable en esa parte del sistema (que me encajaría con lo que leí de Rovelli acerca de las modernas teorías físicas de la información en los sistemas)… Un mundo paralelo (?)… Una especie de personajes en busca de autor… Viviendo en nuestro interior a modo de ensoñación dirigida (?) que tiene cierto feedback (?) que también tiene que encajar de algún modo con los «entornos» históricos en los que nos movemos interiormente (esas especies de mochilas o paradigmas, que «controlan» nuestro comportamiento)…

    Que por cierto esto último me lleva al consejo «asesor» que cita Napoleon Hill.

    Mucha gente ahi dentro… ¿demasiada? ¿necesaria? ¿permanente?

    Tengo un podcast que no oye nadie. Si te apetece podemos grabar unos pequeños podcasts por Skype hablando de algún tema de estos… si te interesa y te apetece… me lo dices y sin prisa podemos probar… jesusb387@gmail.com

    Un beso y gracias por toda este trabajo

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    • es importante resaltar que es una de las teorias sobre el DMN enlazada con la hipotesis de Dunbar sobre la correlaciòn entre el tamaño de la corteza cerebral y el nùmero del tribu / manada en la cual vive el individuo ( primate). en realidad, el tema està en plena investigaciòn. gracias por su tiempo, y por el interes, Jesùs, mañana le envio un mail 🙂 un gran abrazo

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